El legado de George Eastman en la fotografía es innegable. Su visión de hacer que la fotografía fuera accesible para todos cambió la forma en que las personas documentan sus vidas y recuerdos. Kodak se convirtió en una de las empresas más influyentes en la historia de la fotografía y una marca de renombre mundial.
A pesar de su éxito en los negocios, Eastman también enfrentó desafíos personales. En 1932, después de una larga lucha con el dolor crónico debido a una enfermedad espinal, George Eastman se suicidó. Sin embargo, su legado perdura en su impacto en la fotografía y en la filantropía.
En su testamento, dejó una parte significativa de su fortuna para la investigación científica, la educación y las artes. La Universidad de Rochester y el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT) fueron algunas de las instituciones beneficiadas por su generosidad. Su filantropía ha dejado una huella en la educación y la investigación científica que perdura hasta el día de hoy.
George Eastman fue un innovador que democratizó la fotografía, permitiendo que las personas de todas partes pudieran capturar y preservar sus recuerdos visuales de una manera accesible y conveniente. Su fundación de Eastman Kodak Company y su enfoque en la calidad y la innovación lo convirtieron en una figura destacada en la historia de la tecnología y los negocios. A pesar de sus desafíos personales, su legado perdura en la forma en que la fotografía sigue siendo una parte integral de nuestras vidas y en su impacto continuo en la educación y la investigación científica a través de su filantropía. George Eastman es recordado como un visionario cuyo trabajo cambió la forma en que vemos y recordamos el mundo que nos rodea.